Las piscinas de obra son piscinas construidas de manera permanente en un lugar específico utilizando materiales como hormigón, ladrillo y azulejos. Son personalizadas y duraderas, pero requieren una inversión significativa en tiempo y costo de construcción. El revestimiento de azulejos o de otro material resistente al agua protege la estructura y crea una superficie suave para nadar. Las piscinas de obra ofrecen una amplia gama de opciones de diseño y pueden aumentar el valor de una propiedad a largo plazo.
Una piscina de obra es la mejor forma de crear un proyecto personalizado que se adapte a una serie de necesidades especificas. Consultenos las diferentes soluciones constructivas.
Las piscinas de hormigón son construidas con una estructura de hormigón armado que crea la pared y la base de la piscina. Son altamente duraderas y resistentes a la exposición a los elementos y ofrecen una amplia variedad de opciones de personalización en cuanto a tamaño, forma, revestimiento y acabados. Sin embargo, la construcción y el mantenimiento de una piscina de hormigón puede ser costoso y requiere más tiempo y esfuerzo que otros tipos de piscinas.
Las piscinas tipo alberca son piscinas que se asemejan en forma y tamaño a una alberca, generalmente con profundidades uniformes y una forma rectangular o cuadrada. Estas piscinas son ideales para nadar y disfrutar de actividades acuáticas. Una de las principales ventajas de las piscinas tipo alberca es su costo, ya que son más asequibles que otros tipos de piscinas debido a su diseño y tamaño más pequeño
Las piscinas tipo liner son un tipo de piscina prefabricada que se construye con un revestimiento de vinilo flexible. Estas piscinas son asequibles y fáciles de instalar, y ofrecen una amplia variedad de opciones de personalización en cuanto a tamaño, forma y acabados. Sin embargo, el revestimiento de vinilo puede ser vulnerable a daños por la exposición al sol y los productos químicos de la piscina, lo que puede requerir reparaciones o reemplazos. En general, las piscinas tipo liner son una opción popular para los propietarios de piscinas que buscan una opción asequible y personalizable.
Este proceso implica la instalación de pequeñas piezas de mosaico de vidrio o cerámica en las paredes y el fondo de la piscina. El proceso de instalación requiere preparación adecuada de la superficie de la piscina y el uso de una mezcla de cemento y adhesivo para crear un patrón de mosaico atractivo y duradero. El gresite es resistente al desgaste y al desvanecimiento, lo que lo hace una opción ideal para piscinas frecuentemente utilizadas. Sin embargo, el proceso puede ser costoso y requiere mantenimiento regular para mantener la apariencia y la integridad estructural de la piscina.